Ingredientes:
3 litros de agua
3 cucharadas soperas de jengibre en polvo
2 cucharadas soperas de sal marina
Preparación:
Calentar el agua y antes de que hierva (no debe hervir para evitar que pierda sus propiedades) introducir el jengibre y la sal marina (en una bolsita de tela de algodón). Mantenerla dentro del agua 5 minutos y retirarla después.
Manteniendo el agua caliente, pero no demasiado, introducir en esta infusión, una toallita de felpa (de las más pequeñas, de uso facial). Escurrirla bien, retorciéndola en un sentido y en el otro, hasta que no gotee.
Aplicar el fomento directamente sobre la piel, durante unos tres minutos aproximadamente, permaneciendo relajados, suficientemente abrigados y en una postura cómoda. Repetir varias veces, durante unos 20 minutos.
Tras finalizar, frotar la zona enérgicamente con una toalla humedecida con agua fría.
Reservar el preparado y repetir durante 4 o 5 días más, calentándolo de nuevo, sin que llegue a hervir y, si el problema persiste, preparar uno nuevo.
Dónde aplicar los Fomentos (según el problema que se padezca):
Descompensación arterial, dolor de oídos, dolor articular: En la zona lumbar.
Dolores musculares o articulares: En el lugar del dolor.
Pérdida de energía, frío en los pies y/o en las manos: En la zona lumbar y en el bajo vientre (2 dedos por debajo del ombligo).
Catarros fuertes, infecciones de las vías respiratorias: En el pecho y la espalda (niños pequeños sólo en la espalda).
Dolores de cabeza: En lugar de fomentos, introducir los pies dentro de esta infusión.
Algunos trucos, para simplificar la receta:
Colocar en una taza el jengibre y la sal, cubrirlos con el agua caliente. Mantenerla 5 minutos y después colarla, con un colador especial para te o café, con los agujeros muy finos (en lugar de utilizar el saco de algodón).
Tapar el fomento con otra toalla más grande y encima colocar una manta de lana o un saco de semillas calentado previamente durante 3 minutos, para conservar el calor.